Abstract
América desempeña un importante papel en el mercado mundial de aceites y grasas. Es su segundo productor, por su liderazgo en aceite de soya. Igual posición ocupa en aceite de palma, aunque muy lejos de Asia, que ostenta el primer lugar tanto como productor como consumidor de tales commodities, debido al liderazgo global indiscutible de su aceite de palma. La consolidación asiática en ese mercado fue posible por sus relativamente bajos costos de producción. Sin embargo, en los últimos años los asuntos ambientales y sociales relacionados con la producción de aceite de palma han adquirido importancia en los países consumidores. Lo cual implica que, aunque mantener bajos costos de producción sigue siendo importante para profundizar el acceso a los mercados, no son el único factor que se debe tener en cuenta. El cumplimiento de los estándares ambientales y sociales se ha convertido en un requisito para el acceso a los mercados. En este contexto, los mercados actuales de aceite de palma en todo el mundo ofrecen espacio para la diferenciación, y por consiguiente, proporcionan incentivos económicos para lograr el desarrollo sostenible de la agroindustria de la palma de aceite. Y ahí América tiene una oportunidad única, si logra superar retos relacionados con los costos de producción y la productividad de los cultivos. En este artículo se explican las razones por las cuales ello es posible.America plays an important role in the oils and fat global market. It is its second producer, due to its leadership in soybean oil. Same position has palm oil, however so far from Asia, which holds the first place both as producer and consumer of such commodities, due to its undisputed global leadership in palm oil. Asian consolidation in that market was possible by its relatively low production costs. However, in recent years the environmental and social issues related to palm oil production have earned importance in consumer countries. This implies that, while maintaining low production costs is still important to deepen market access, this is not the only factor to consider. Compliance with environmental and social standards has become a prerequisite for the market access. Within this context, the current markets for palm oil worldwide offer room for differentiation, and therefore, provide economic incentives for sustainable development of the oil palm industry. And there is where America has a unique opportunity, if overcoming challenges related to costs of production and productivity of crops. This article explains the reasons why this is possible.