Abstract
Con base en la experiencia, la adopción de una norma mínima de maduración, v.g. cinco frutos desprendidos por racimo, con ciclos de cosecha de diez días, ha sido satisfactoria la producción de racimos de fruta fresca (rff) de buena calidad. No obstante, esta norma de cosecha debe ajustarse como y cuando sea necesario, de acuerdo con la altura de las palmas, la topografía, las condiciones climáticas de otros factores, inclusive dentro de la misma plantación. También es necesario llevar a cabo prácticas de cosechas como las descritas en el artículo. Para el control de calidad de la cosecha más efectivo, todos los cosechadores y el personal de cosecha deben estar bien informados acerca de la norma requerida y debe existir mejor cooperación e intercambio con la planta donde se procesa el fruto.