Abstract
Es un gusto para mí hacer parte del Congreso Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite en su quincuagésima versión, máxima instancia de la Federación y espacio en el que se realiza el ejercicio democrático del sector. Estar hoy frente a ustedes, de cuerpo presente, en este espacio tan importante para el gremio, me lleva a reflexionar en los nueve meses transcurridos desde que asumí la presidencia ejecutiva. Antes que nada, quiero aprovechar este momento para agradecerle a todos y cada uno de los miembros de la Junta Directiva de Fedepalma por el apoyo y guía en esta transición. Especialmente quiero reconocer y agradecerle a Catalina Restrepo por su liderazgo, y por la dedicación y entusiasmo con los que condujo la presidencia de la Junta en esta etapa crucial.